Año primero después de Ferguson

Sin la figura de Alex Ferguson y con la de Wayne Rooney con un pie fuera de Old Trafford, el United comienza la era Moyes sin muchas novedades en su plantilla.

Manchester atraviesa un sinvivir ante la más que posible marcha de Wayne Rooney. El internacional inglés ha expresado su deseo de abandonar el equipo, pero ni David Moyes ni el resto de la entidad están dispuestos a consentirlo.

La batalla entre ambas partes acarreó que Rooney decidiera desvincularse por completo del United. El delantero no jugó ninguno de los últimos partidos del equipo por lesión, lo cual se comprobó que era incierto, ya que sí lo hizo el pasado miércoles con su selección ante Escocia.

Al margen del caso Rooney, El United está sembrando un puñado de dudas fruto de las incorporaciones que no han llegado y que parecen no llegar. Han sido varios los nombres que han sonado para reforzar la plantilla, pero la realidad es que el club no ha conseguido acercar posturas con ninguno de ellos. Los guiños de David Moyes a sus ex, Leighton Baines y Marouane Fellaini, no están surtiendo efecto, al igual que Cesc Fàbregas, que ha cerrado la puerta de su posible salida del Barcelona.

'Van Persiedependencia'El juego desplegado por el equipo tampoco invita a confiarse. Ni siquiera la reciente conquista de la Community Shield merece maquillar la mediocre pretemporada de los 'red devils'. Las derrotas ante la selección de Tailandia y en Oldtrafford ante el Sevilla evidencian que el nuevo proyecto de David Moyes está todavía por carburar. ¿Habrá hecho mella en el equipo la pérdida de Alex Ferguson? La respuesta queda en el aire e irá conociéndose con el paso de las jornadas.

El buen transcurso de los partidos del United pasa por las botas de su actual crack en estado puro, Robin Van Persie. El holandés está tocado por una varita mágica desde que se destapara en su última temporada en el Arsenal como un goleador de élite y no ha parado de fabricar goles. Todo lo que le llega, prácticamente lo mete. El máximo goleador de la Premier de las pasadas dos temporadas se perfila, de nuevo, como el verdadero mandamás para conducir al equipo por la buena dirección.

Pese a la infinidad de cabos sueltos que quedan por atar en Manchester, el acierto goleador de Van Persie combinado con la estampa intimidatoria inmortal de Oldtrafford auguran que el United volverá a pelear por todo.